En la actualidad la demanda de empleos está orientada hacia el ofrecimiento de servicios, de lejos por encima de la producción de bienes materiales. Y es que los servicios se han constituido como la principal fuente de movimiento económico, seguido de las actividades productivas tradicionales, como los son la agricultura, ganadería o la pesca. Si tenemos en consideración que son los hombres y mujeres los promotores de los servicios, podemos decir que el principal capital con el que cuenta el planeta en estas últimas décadas es el capital humano. En segundo lugar la industria textil juega un rol primordial dentro del sistema de colocación de empleos, solamente esta industria factura al año miles de millones de dólares y ofrece una estabilidad laboral para miles de personas dedicadas al sector servicio y la producción, generando una considerable dinámica financiera que llega a beneficiar a los dependientes de la textilería. Otra actividad que cumple una participación importante dentro de las comunidades modernas, es la actividad bancaria, los centros financieros se constituyen como otra importante fuente de empleos y es en este rubro en el que otros miles de empleados se desempeñan y ofrecen sus servicios.
Finalmente, otras dos áreas que recién han iniciado su despegue económico con éxito en estos últimos años y ya se han convertido en una importante fuente generadora de empleos, en tanto que empleados para estos rubros son de los más buscados, son las áreas del turismo y la cultura, se destaca en estas áreas el aprovechamiento de ciudades tradicionales, que ofrecen empleos en sus museos, en investigación en la historia del arte, el arte popular, arquitectura, arqueología, hotelería, entre otros. Son las industrias mencionadas las que presentan una fuerte demanda de empleos y a partir de esto una variedad de cursos orientados a especializar profesionales capacitados para desenvolverse en sus campos laborales.
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